TAPA BLANDA , LIBRO USADO, RECUERDA QUE EL 10% DE ESTA VENTA COLABORA CON FUNDACIONES QUE FOMENTAN LA LECTURA EN ZONAS VULNERABLES. Una de las cosas más admirables de David Gallagher es haber conseguido, en este tiempo marcado a fuego por la maldición de la especialidad, ser un humanista moderno, alguien curioso e informado sobre todo lo que ocurre en el ámbito de la cultura, sin naufragar en el mero diletantismo, manteniendo siempre una perspectiva rigurosa sobre lo que lee, oye y ve y asociándolo a una visión de conjunto en la que las ideas, las artes y las letras no sólo son un placer del espíritu, también un arma para mejorar lo que anda mal y defenderse contra el infortunio. El joven profesor que incitaba hace treinta años a los estudiantes de Oxford a aventurarse en las fantasías de la literatura latinoamericana es, culturalmente hablando, un ciudadano del mundo, que lee en muchas lenguas, recorre los países visitando exposiciones, asiste a conciertos, es un fanático de la ópera, y, a la vez, se las arregla, en las conferencias y congresos donde no puede dejar de abrir la boca, para defender con aplastante lógica y ejemplos abrumadores la política económica que ha hecho, hoy, de Chile, el único país latinoamericano que parece definitivamente encaminado para dejar atrás la ignominia del subdesarrollo. MARIO VARGAS LLOSA