TAPA BLANDA, LIBRO USADO, RECUERDA QUE EL 10% DE ESTA VENTA COLABORA CON FUNDACIONES QUE FOMENTAN LA LECTURA EN ZONAS VULNERABLES. Buenos Aires, 1894. El detective Craig acaba de morir, y el joven investigador Sigmundo Salvatrio, protagonista de El enigma de París, queda a cargo de su agencia. Enseguida debe enfrentar el primer caso en solitario: el poeta y periodista Jerónimo Seguí le pide que busque a un amigo desaparecido, de profesión anticuario. Cuando aparece el cadáver, las pistas guían a Salvatrio hacia un grupo de “filósofos de los jardines”, quienes intentaron en el pasado arrebatarle al famoso Carlos Thays, director de Parques y Paseos, el diseño de los grandes espacios verdes de la ciudad. ¿Qué lugar ocupan los jardines en la cultura? ¿Deben ser los jardines una réplica del Edén, antes de la caída de Adán, o deben ser ordenados y geométricos, como los jardines de la Atlántida? ¿Requieren un diseño secreto? ¿Es posible que estas teorías hayan inspirado una serie de crímenes? Un psiquiatra, un anticuario, un poeta, un cazador y un rico empresario dedican largas tardes a meditar sobre estas cuestiones y sobre la importancia de la mitología. En el centro de la intriga están Baltazar Dux Olaya, el señor de la sal, y su hija Irene, bellísima, loca y visionaria. Con gran maestría, Pablo De Santis ha escrito una novela excepcional, en la que brutales crímenes suceden cuando toman su forma definitiva los Bosques de Palermo y el Jardín Botánico de Buenos Aires. La investigación de Salvatrio lo lleva a preguntarse por el origen de la Atlántida, a enfrentarse con Castelvetia, el investigador expulsado de los Doce Detectives, a alojarse en el sombrío Hotel de los Suicidas y a contemplar diariamente su propia esfinge, su enigma doméstico: la señora Craig.